lunes, 19 de enero de 2009

Enfermeria Episodica I

Definición:

-Ciencia y arte de ayudar a las personas si padecen de alguna enfermedad y si esta se encuentra sana ayudarla a no ser enfermada en caso de ya no tener remedio ayudarla a morir.

La enfermería es la ciencia del cuidado de la salud del ser humano. Es la ciencia o disciplina que se encarga del estudio de las respuestas humanas reales o potenciales de la persona, familia o comunidad tanto sana como enferma en los aspectos: biológico, psicológico, social y espiritual (definición de la Facultad de Enfermería de la Universidad Autónoma de Yucatán, México) Es la profesión de titulación universitaria de la persona que se dedica al cuidado integral del individuo, la familia y la comunidad en todas las etapas del ciclo vital y en sus procesos de desarrollo.

Concepto:

-Se concibe como la atención oportuna, personalizada, humanizada, continua y eficiente que brinda el personal de enfermería, de acuerdo con estadares definidos para una practica profesional y competente y responsable, con el propósito de logar la sastifacion del usuario y el prestador del servicio.

La primera Teoría de enfermería nace con Florence Nigtingale, a partir de allí nacen nuevos modelos cada uno de ellos aporta una filosofía de entender la enfermería y el cuidado.

Desde sus orígenes era considerada como una ocupación basada en la práctica y en el conocimiento común, no era considerada como ciencia, el conocimiento científico aparece con la primera teoría de enfermería. Las enfermeras comenzaron a centrar su atención en la adquisición de conocimientos técnicos que les eran delegados, con la publicación del libro " Notas de Enfermería " de Florence Nigtingale en 1852, se sentó la base de la enfermería profesional, en su libro Florence intento definir la aportación especifica de enfermería al cuidado de la salud.

Desde 1852 hasta 1966 se creo y desarrollo una corriente filosófica que buscaba los fundamentos de la profesión y es durante la década de 1950 a 1996, que surge la teoría de enfermería de Virginia Avenel Henderson.

Henderson definió enfermería en términos funcionales. La única función de la enfermera consiste en ayudar al individuo, sano o enfermo a recuperar la salud (o a una muerte tranquila), que realizaría sin ayuda si contara con la fuerza, voluntad o con el conocimiento necesario, haciéndolo de tal modo que se le facilite la independencia lo más rápido posible, afirmaba que a medida que cambiase las necesidades del paciente también podía cambiar la definición de enfermería.
Para Henderson su definición de enfermería no era definitiva, consideraba que enfermería cambiaria según la época en que se practicase y que dependía de lo que realizara el personal de salud.

Virginia Henderson incorpora los principios fisiológicos y psicopatológicos a su definición de enfermería en sus innumerables trabajos explicó la importancia de la independencia de enfermería y, a la vez, de su interdependencia con respecto a otras ramas dentro del área de la salud.

Este es un trabajo de tipo documental donde se realiza una breve reseña de su biografía y su teoría de enfermería, la cual se basa en los catorce
Componentes de enfermería, es decir, en las catorce necesidades básicas del ser humano

La teoría de Virginia Henderson es considerada como una filosofía definitoria de enfermería, se basa en las necesidades básicas humanas. La función de la enfermera es atender al sano o enfermo (o ayudar a una muerte tranquila), en todo tipo de actividades que contribuyan a su salud o a recuperarla. Su objetivo es hacer al individuo independiente lo antes posible para cubrir sus necesidades básicas, el cuidado de enfermería se aplica a través del plan de cuidado.

Para Henderson la función de ayuda al individuo y la búsqueda de su independencia lo más pronto posible es el trabajo que la enfermera inicia y controla y en el que es dueña de la situación. Henderson parte de que todos los seres humanos tienen una variedad de necesidades humanas básicas que satisfacer, estas son normalmente cubiertas por cada individuo cuando esta sano y tiene el conocimiento suficiente para ello. Las necesidades básicas son las mismas para todos los seres humanos y existen independientemente.

Las actividades que las enfermeras realizan para ayudar al paciente a cubrir estas necesidades es denominadas por Henderson como cuidados básicos de enfermería y estos se aplican a través de un plan de cuidado de enfermerías, elaborado de acuerdo a las necesidades detectadas en el paciente.

Definición de Enfermería

Tiene como única función ayudar al individuo sano o enfermo en la realización de aquellas actividades que contribuya a su salud o recuperación (o una muerte tranquila) que realizaría sin ayuda si tuviese la fuerza, voluntad o conocimiento necesario, haciéndolo de tal modo que se le facilite su independencia lo más rápido posible.

Salud

Es la calidad de salud más que la propia vida, es ese margen de vigor físico y mental lo que permite a una persona trabajar con su máxima efectividad y alcanzar un nivel potencial más alto de satisfacción en la vida.

Entorno
Es el conjunto de todas las condiciones e influencias externas que afecten a la vida y al desarrollo de un individuo.

Persona (paciente)
Es un individuo que necesita ayuda para recuperar su salud, independencia o una muerte tranquila, el cuerpo y el alma son inseparables. Contempla al paciente y a la familia como una unidad.

Necesidades
Señala catorce necesidades básicas y estas son:
o Respirar normalmente.
o Comer y beber de forma adecuada.
o Evacuar los desechos corporales.
o Moverse y mantener una postura adecuada.
o Dormir y descansar.
o Elegir la ropa adecuada (vestirse y desvestirse).
o Mantener una adecuada temperatura del cuerpo seleccionando la ropa y modificando las condiciones ambientales.
o Mantener higiene corporal, proteger la piel y tener buena apariencia física.
o Evitar peligros y no dañar a los demás.
o Comunicarse con otros expresando sus emociones, necesidades, temores u opiniones.
o Profesar su fe.
o Actuar de manera que se sienta satisfecho consigo mismo.
o Participar y disfrutar de diversas actividades recreativas.
o Aprender, descubrir o satisfacer la curiosidad que conduzcan al desarrollo normal, a la salud y acudir a los centros de salud disponibles.

ANTECENDENTES:

-Durantes el periodo histórico en el que se debatía la definición liberal de la republica e advierten la ausencia de competencia institucional del gobierno, federal en la prestaron de servicios de atención y en lo relacionado a las acciones de salubridad; conforman a la constitución de 1857, dicha competencia estaba bajo la jurisdicción de los estados, realizando la federación alguna de ellas en forma limitada, son concebirse la existencia de un verdadero sistema de salud.

-En 1872 se expide el derecho que pone en vigor el reglamento del consejo superior de salubridad y el 14 de julio de 1879, aparecen su reglamento y programa de trabajo, derivándose acciones importantes como la creación de juntas de salubridad en cada uno de los estados, juntas de sanidad en los puertos participando en aspectos de ingeniería sanitaria, higiene de los alimentos e higiene industrial y de trabajo.

-La labor desarrollada por el citado consejo lo conduce a emitir en términos formales: el territorio federales en 1899 y mas tarde en 1902, expide el nuevo código y del trabajo.

-La participación marginal del gobierno federal conduce, en 1908 a modificar la constitución para ampliar la competencia federal y encomendar a los poderes de la unión ‘’ LA SALUBRIDAD GENERAL DE LA REPUBLICA’’, promulgación de la constitución de Querétaro en 1917 y las disposiciones que emanan de ella permiten que se haga el reconocimiento de la importancia de la salud publica, mediante la transformación del consejo superior de la salubridad en un organismo nacional y la creación del departamento de salubridad publica, que con apoyo en la ley de organización política del gobierno federal establece que en casos de emergencia podría conducir a los asuntos de higiene publica en los tres niveles de gobierno, según lo establece el articulo 73 de dicha constitución.

-A cargo de gobierno estatal o municipal se encontraban la responsabilidad de la organización de los servicios asistenciales, incluyendo consultorios y hospitales para la atención médica.


FUNCION DE LA ENFERMERA COMUNITARIA

El trabajo en comunidad es una de las funciones sustantivas de Enfermería, el brindar apoyo a la población, desarrollando diversas actividades enfocadas a la procuración, prevención y mantenimiento de la salud del individuo, familia y comunidadDesde 1984, momento en que comenzó la reforma de la Atención Primaria con los postulados de Alma Ata, el desarrollo del profesional de Enfermería ha sido notable, pero no suficiente, para cumplir con toda las expectativas que despertó. Todo esto lleva a:- Crear nuestra propia demanda, y ofertar a la población y a la administración tareas propias e independientes que solo el profesional de enfermería y no otro está capacitado y legitimado para realizar. - Crear la accesibilidad a la población, lo que se traduce en que su vía de acceso al sistema no sea únicamente la consulta médica, y que sea posible en el día. - Desarrollar el trabajo en la comunidad, y con grupos de riesgo. - La atención domiciliaria sigue siendo escasa y sin continuidad. - Crear y consolidar registros propios (lo que no se escribe, no existe) con un lenguaje común que permita una evaluación de calidad y que sirva de base para la investigación enfermera.

La salud de la comunidad, siempre ha sido y sigue siendo un propósito esencial de los Gobiernos, así como de los profesionales de la salud que ven a la comunidad como un campo en el cual deben realizar funciones concretas y relativas a su problemática, como responsabilidad inherente al actual profesional enfermero.Existen diversos enfoques para clasificar o diversificar las funciones o acciones de Enfermería en la Comunidad.

FUNCIONES ADMINISTRATIVAS.
-Es una actividad vinculadota que permite aprovechar la capacidad y esfuerzos de todos los integrantes de una organización dirigiéndolos racionalmente hacia el logro de unos objetivos comunes.Comprenden lo siguiente:a- PLANIFICACION de los programas, acciones y actividades relativas a la salud comunitaria, en todas las cuales Enfermería desempeña un papel específico. Esta función incluye la identificación y rol que se refiere a los recursos con que cuenta la comunidad u otros que se vienen de fuera y que coadyuvarán al desarrollo y logro de los programas y actividades planificados.b- SUPERVISIÓN del personal auxiliar y del personal comunitario, que interviene en el desarrollo de los programas de salud de la comunidad, y en todo aquello que tenga que ver con ésta y con su desarrollo. Es evidente que para un adecuado cumplimiento de la función de supervisión, la enfermera debe tener preparación específica, personalidad estable y don de

La Enfermería en Salud comunitaria constituye el mayor potencial al alcance de los países para extender los servicios de salud a la población más necesitada, pero la tasa enfermera / médico está invertida, en casi todos los países, esto se da porque no existen las plazas necesarias para absorber todas las enfermeras que egresan anualmente. La magnitud de este problema adquiere mayor relevancia frente a la situación de salud que es necesario resolver: por ser la población mayoritariamente joven, las enfermedades de la infancia y del adulto joven constituyen el grueso de los problemas de salud a atender. Sin embrago, también el aumento gradual de la expectativa de vida ha traído consigo el incremento de población e riego de adquirir enfermedades degenerativas crónicas. El crecimiento demográfico así como la mortalidad en la primera infancia, son significativamente altos en particular entre la población rural y en la marginada de las zonas urbanas . La mortalidad infantil ocurre con bastante frecuencia por enfermedades de origen infeccioso, algunas de ellas prevenibles y agravadas por deficiencia nutritivas. En la población de edad productiva, las tasas de mortalidad por accidentes y por complicaciones del embarazo son igualmente significativas en algunos países.Los países están adoptando tendencias que han ido conformando modelos de sistemas de salud de características acordes con sus recursos y en consonancia con sus necesidades, que exigen cambios fundamentales en el concepto de la práctica de Enfermería en Salud Comunitaria. El problema de medir el nivel de salud de la comunidad es uno de los más complejos e importantes para el equipo de salud; este trabajo debe realizarse periódicamente en la comunidad y con su participación activa. Tiene un gran valor, pues mejora la calidad y eficiencia del trabajo, y consecuentemente mejora el grado de satisfacción con una interrelación equipo de salud-familia-comunidad.

ALGUNOS CONCEPTOS DE ENFERMERIA EN SALUD COMUNITARIA

La ciencia y el arte de la Enfermería en Salud Comunitaria se basa en las ciencias físicas, biológicas y de la conducta. Partiendo de estas premisas, se identifican varios conceptos importantes que pueden ser considerados como marco de referencia para la enseñanza y ejercicio de la Enfermería en Salud Comunitaria.La enfermería en salud comunitaria tiene un enfoque relacionado con la atención de la comunidad basándose en la identificación de problemas de salud, que le sirven como base para la planeación de actividades relacionadas con promoción para conservar la salud y prevenir enfermedades derivadas con los riesgos identificados, actividades educativas encaminadas a colaborar con la solución de los problemas identificados, como parte integrante de un equipo multidisciplinario de salud.La enfermera comunitaria realiza sus actividades con grupos vulnerables identificados, con familias o de manera individualizada, con uno o más miembros de la familia, utilizando todos lo recursos disponibles del sistema familiar.Muchos autores coinciden desde distintos puntos de vista, en la necesidad y la incapacidad hasta ahora de definir los contenidos concretos del trabajo de la enfermera, ( se le llame a esto producto, servicio, actividad o contenido de la consulta ), Hay distintos estudios sobre este aspecto, con resultados dispares, algunos encuentran que la enfermera se dedica de forma fundamental a actividades preventivas o relacionadas con la prevención, otros que las actividades se centran principalmente en el control de patologías crónicas o prevención secundaria, otros distinguen en la organización del trabajo comunitario la relación de los programas de salud y otros se centran en el punto de vista del usuario. Además de un problema de lenguaje y en algunos casos de concepto, lo que todo esto transmite es la falta de homogeneidad en el trabajo de la enfermería de salud comunitaria. Se definen como áreas específicas de actuación del personal de enfermería, los cuidados directos, la promoción, prevención, rehabilitación y reinserción social; la atención domiciliaria; y otras actividades propias dirigidas al autocuidado. En lo referente a los cuidados directos pueden ser prestados en régimen ambulatorio, domiciliario y de urgencia - mediante protocolos establecidos para ser ejecutados por enfermería - , además de aplicar medios diagnósticos y terapéuticos. La promoción, prevención, rehabilitación y reinserción social, se debe realizar en especial en los casos de problemas crónicos de salud, prevenir cuando existan factores de riesgo, todo ello posibilitando la participación y los registros.La Enfermería en Salud Comunitaria es la síntesis y aplicación de un amplio espectro de conocimientos y técnicas científicas a la promoción, restauración y conservación de la salud comunitaria. El sujeto primario de su asistencia es la comunidad y grupos dentro de ella, unidades de trabajo a través de las cuales se logran niveles más altos de Salud Comunitaria. A Enfermería en Salud Comunitaria le incumbe la identificación de necesidades sanitarias generales de la comunidad y la tarea de conseguir la participación de la comunidad en la ejecución de programas relacionados con la salud y el bienestar de la población. Una enfermera de Atención Primaria especialista en Salud Comunitaria puede aumentar la longitudinalidad de la atención al valorar al individuo y la familia desde la perspectiva de la necesidad de cuidados. Además puede jugar un buen papel de filtro, evaluando profesional y objetivamente las derivaciones a especialistas y pruebas complementarias protocolizadas en los programas establecidos, asegurando una visión global del paciente, siendo un nexo capacitado entre los servicios sanitarios y sociales. Para conseguir todo esto es necesario contar con enfermeras especialistas adecuadamente formadas (conocimientos, habilidades y actitudes) y que consigan que la población les reconozca como parte del primer contacto con el sistema sanitario.

Hoy en día, con la puesta en marcha de lo que se dio en llamar consulta de enfermería y, posteriormente, con la potenciación de la proyección comunitaria, las modalidades de atención del personal de enfermería en los centros de salud son cuatro:

1. Consulta de enfermería, en la que se presta atención individualizada o familiar fundamentalmente por enfermedades crónicas y materno infantiles, pero también de consejo y detección temprana de enfermedades,
2. Visita domiciliaria, mediante la que se proporcionan cuidados en el domicilio, englobando actividades curativas, preventivas, rehabilitadoras y de enlace con otros servicios sociales y sanitarios. La atención domiciliaria debe ser personalizada, y aplicada en especial en pacientes inmovilizados, termínales y en tratamientos que requieran especial supervisión
3. Trabajo con la comunidad, prestando atención a grupos de población, centrada en promoción de la salud y educación sanitaria, vigilancia del medio y participación comunitaria.
4. Servicios comunes, que incluyen administración de inyectables y curaciones, métodos diagnósticos o toma de muestras, tanto en el centro como a domicilio.

Debemos tener en cuenta que los conceptos anteriormente descritos engloban etimológicamente a la comunidad, la salud humana, la salud de la comunidad y la prevención.

ENFERMERA DE HOY Y AYER

-Las enfermeras de ayer eran enfermeras empíricas (no graduadas). Eran muy humanitarias, pues hacían labores fuera y dentro de los hospitales también visitaban las casas para atender los partos de mujeres embarazadas a estas la llamaban parteras.

-Las enfermeras de ayer tenían una característica muy diferente a las de hoy pues ellas le mostraban afecto amor y cariño a sus paciente.

Vestimenta de la enfermera de ayer

-Usaban faldas largas.
-Camisas mangas largas.
-Un gorro con un pequeño velo.
-Medias largas.
-Zapatos medios altos.
-Un delantal en el que introducían sus elementos de trabajos.

La Lámpara.
Otro atributo que aparece con frecuencia en el uniforme o en la cofia de las enfermeras, ha sido retomada como símbolo de la enfermería, pues

En la mujer:

Usar el uniforme reglamentado. Cuando se trate de vestido o saya, debe, tener el largo a la rodilla y usar medias largas. El ancho del vestido, chaqueta y pantalón, debe permitir realizar movimientos con soltura y sin impedimentos.

Llevar pelo corto o recogido.
Utilizar gorro o cofia de acuerdo a la actividad que realiza.
Tener uñas cortas y con pintura discreta.
Usar reloj con secundario.
Evitar el uso de prendas no requeridas durante el desarrollo de su labor (pañuelos de cabeza, collares, aretes colgantes u otros)
Maquillaje discreto.
Mantener los zapatos limpios.
En el hombre:
· Llevar el uniforme reglamentado (limpio y holgado).
· Mantener el pelo corto y la barba rasurada.
· Tener uñas cortas.
· Usar reloj con secundario.
Mantener los zapatos limpios


Vestimenta de la enfermera de hoy
La comunicación

La comunicación es un proceso de interacción entre 2 entes(o más) en donde se transmite una información desde un emisor que es capaz de codificarla en un código definido hasta un receptor el cual decodifica la información recibida, todo eso en un medio físico por el cual se logra transmitir, con un código en convención entre emisor y receptor, y en un contexto determinado.

La comunicación es de suma importancia para la supervivencia de especies gregarias, pues la información que ésta extrae de su medio ambiente y su facultad de transmitir mensajes serán claves para sacar ventaja del modo de vida gregario


LA COMUNICACION ENTRE ENFERMERA Y PACIENTE

La enfermera requiere de competitividad profesional, múltiples habilidades y relación armonica.Enfermera –paciente; por tanto es muy importante que tome encuenta que a diario transmite energía mediante su comunicación todas las personas cuentan con los mismo elementos en este proceso( cuerpo,valores,expectativa del movimiento,organos de los sentidos, capacidad para hablar,palabras,voz y cerebro).Este ultimo por el conocimiento que ha quedado registrado en los dos hemisferio cerebrales.

La comunicación es un proceso delicado y complicado mediante el cual nos podemos entender para vivir con los demás así como solucionar conflictos con los semejantes y con uno mismo.

En el caso de la comunicación es un proceso interpersonal eso significa conectarse con otras personas en un nivel emocional y no solo intelectual.


La comunicación entre enfermero y doctor

La comunicación entre enfermero y doctor debe ser buena ya que con la comunicación entre ellos pueden salvar vidas y ayudar amuchas personas a recuperarse.

LAS PRIMERAS ESCUELA DE ENFERMERIA

Desde su fundación en 1890 agresaro de esta escuela mas de 1500 enfermeras.

HISTORIA

1890: primera escuela en argentina organizada bajo el sistema nigtingale.
1908: se adopta la curricular formativa de la escuela del hospital santo Thomas de Londres
1964: es reconocida oficialmente por el ministerio de salud pública

SAN NICOLAS DE BARI:

Ruinas del templo y hospital de san Nicolás de baris, fue construida en el año 1503 al 1508 por don Nicolás de ovando gobernador de la isla española y sus dependencias era la primera iglesia de la america.Fue construido de con piedra y paja.

PADRE BILLINI

AP perpetuam rei memorian.

EL hospital de san Andrés, hoy padre billini.

Es uno de los capitulo de la fundación de la catedral de santo domingo la orden de la fundación vino de fray garcía padilla en fecha de 12 mayo de 1512.

Primeras propulsora:

Lilliam wald:

-Era idealista practico que trabajo para crear a una sociedad mas justas meta era asegurarse de que las mujeres y los niños, los inmigrantes y los pobres, los inmigrates y los pobres,y los miembros de todos los grupos étnicos y religiosos realizaran la promesa de América de la ‘’ vida,de la libertad y de la brusquedad de la felicidad’’.

Como enfermera joven, Wald esperaba proporcionar cuidado médico decente a los residentes de viviendas más bajas del lado del este de Nueva York. Su trabajo como el fundador del establecimiento de la calle del Henrio y el visitar cuidan servicio demostraron sus talentos administrativos masterful, respeto profundo para la humanidad y habilidad en la movilización de fondos y la publicación. Defendiendo las causas del oficio de enfermera de la salud pública, de la reforma de la cubierta, del sufragio, de la paz del mundo, y de las derechas de mujeres, de niños, de inmigrantes y de la gente del funcionamiento, Wald sintió bien a un líder influyente en ciudad, lo indica, y política nacional. Sus esfuerzos incansables de ligar la salud de niños a la salud de naciones le hicieron un modelo del logro, de cuidar, y de integridad a través de su curso de la vida. Aunque Wald alcanzó el reconocimiento internacional, sus esfuerzos fueron puestos a tierra siempre en la creencia que el mundo era simplemente una versión ampliada de la vecindad cultural diversa.


HILDEGARDE PEPLAU

Hildegard E. Peplau, una líder mundial en enfermería, conocida como la enfermera del siglo, murió el 17 de marzo de 1999 a la edad de 89 años, en su hogar en Sherman Oaks, California. Peplau es la única enfermera que prestó sus servicios a la Asociación de Enfermeras Americanas (ANA), como directora ejecutiva y, más tarde, como presidenta. También fue elegida para trabajar durante dos períodos en la junta directiva del Consejo Internacional de Enfermeras (ICN).

En 1997 recibió el mayor honor en enfermería, el premio Cristiané Rumann, en el congreso cuadrienal de la ICN. Esta distinción se otorga cada cuatro años por contribuciones nacionales e internacionales sobresalientes en enfermería y cuidado de la salud. Un año antes, la Academia Americana de Enfermería le había rendido un homenaje como leyenda viviente. En 1998 la Asociación de Enfermeras Americanas la colocó en el salón de la fama de la ANA.

Por otra parte, la doctora Peplau es reconocida mundialmente como la madre de la enfermería psiquiátrica. Su trabajo teórico y clínico condujo al desarrollo de un campo distinto de especialización: enfermería psiquiátrica.

El libro inicial de Peplau Las relaciones interpersonales en enfermería fue terminado en 1948 pero su publicación se pospuso por cuatro años, porque en aquel entonces se consideró muy revolucionario que una enfermera publicara un libro sin un médico como coautor. El libro de Peplau ha sido ampliamente acreditado con la transformación de enfermería, que pasó de ser un grupo de trabajadoras expertas a ser una profesión con gran desarrollo.

Desde la publicación del trabajo de Peplau, el proceso interpersonal ha sido integrado en la educación y la práctica de enfermería en Estados Unidos y en el exterior. Por esto, la vida y el trabajo de la doctora Peplau produjeron los mayores cambios en la práctica de enfermería después de los de Florence Nigtingale.

Peplau recibió títulos de doctora honoraria en universidades como las de Alfred, Boston Collage, Colombia, Duke, Indiana, Ohio State, Rutgers y la Universidad de Ulster, en Irlanda. En 1995 fue nominada a una de las 50 Grandes de América en ¿quién es quién? por Marquis. Fue elegida miembro de la Academia Americana de Enfermería del Sigma Theta Tau y de la Sociedad Honoraria de Enfermería.

Hildegard Peplau nació el 1º de septiembre de 1909 en Reading, Pensilvana; segunda hija de los emigrantes Gustav y Ottylie Peplau, tuvo dos hermanas y tres hermanos. En su niñez presenció la devastadora epidemia de gripa en 1918; esta experiencia personal influyó enormemente su comprensión del impacto que tiene la enfermedad y la muerte sobre las familias. Inició su carrera de enfermería en Pottstoen, Pensylvania. Luego trabajó como enfermera de planta en Pensylvania y en la ciudad de Nueva York. Un cargo en un campo de verano de la universidad de Nueva York, la llevó a que recibiera recomendación para trabajar como enfermera en el Collage Bennington en Vermont. Allá se graduó en psicología interpersonal en 1943. En Bennington, y a través de sus experiencias de campo en Chestnut Lodge (una institución psiquiátrica privada), estudió con Erich From, Frida From-Reichmann y Harry Sullivan. Peplau trabajó toda su vida tratando de enfocar y extender la teoría interpersonal de Sullivan a la práctica de enfermería.
Entre 1943 y 1945 Peplau sirvió en el grupo de enfermería de la armada y fue asignada al campo 312 del Hospital Estación en Inglaterra, donde estaba localiza la Escuela Militar Americana de Psiquiatría. Después de la guerra, Peplau se sentó a la mesa con muchos de estos hombres, para trabajar en la reestructuración del sistema de salud mental en Estados Unidos, de allí surgió el acta de salud mental nacional de 1946. Peplau obtuvo sus títulos de master y doctorado en el Teachers Collage de la Universidad de Colombia. También fue certificada en psicoanálisis por el Instituto William Alanson White de Nueva York. Al inicio de los años cincuenta, Peplau desarrolló y dictó las primeras clases para las estudiantes de postgrado de enfermería psiquiátrica en el Teachers Collage. Además, se desempeño como profesora de la Facultad de Enfermería de Rutgers entre 1954 y 1974. Allí creó el primer programa de postgrado con preparación de especialistas clínicas en enfermería psiquiátrica.

Fue una escritora prolífica conocida por sus presentaciones, conferencias y talleres para entrenamiento clínico Peplau luchó vigorosamente para que las enfermeras tuvieran mayor educación y así pudieran dar un verdadero cuidado terapéutico a los pacientes antes que el cuidado de guardianas, prevalente en los hospitales psiquiátricos en aquel tiempo. Durante los años 50 y 60, lideró seminarios de verano en todo Estados Unidos, en especial, en los hospitales psiquiátricos del estado. En estos seminarios enseñó los conceptos interpersonales, las técnicas de entrevista y terapia de grupo, individual y familiar.

Peplau fue consultora de la Organización Mundial de la Salud y profesora visitante en universidades de África, América Latina, Europa y Estados Unidos. Luchó fuertemente por la educación de postgrado y la investigación en enfermería. Además, fue consultora de la Superintendencia de Salud de Estados Unidos, de la Fuerza Aérea Americana, del Instituto Nacional de Salud Mental y participó en grupos gubernamentales para el diseño de políticas. Después de su retiro de la Universidad de Rutgers fue profesora visitante de la Universidad de Leuven en Bélgica entre 1975 y 1976, allí ayudó a establecer el primer programa de postgrado en enfermería en Europa.

Peplau dijo alguna vez que la prueba de una buena idea depende de tener o no el poder permanente. Su libro original de 1952 ha sido traducido a nueve idiomas y en 1989 se reeditó por la editorial MacMillan de Londres. En 1989, Springer publicó un volumen con una selección de algunos de los artículos inéditos. Las ideas de Peplau han superado la prueba del tiempo. Los archivos de su trabajo y vida se conservan en la biblioteca Schlesinger en la Universidad de Harvard.

Se han planeado homenajes por la Asociación de Enfermeras Americanas, la Asociación Americana de Enfermeras Psiquiátricas y otras organizaciones de enfermería. La familia solicita las contribuciones en su memoria a la fundación Peplau para la investigación, fundación de enfermeras americanas.

Santa Brígida

SANTA BRIGIDA era hija de Birgerio, gobernador de Uplandia, la principal provincia de Suecia. La madre de Brígida, Ingeborg; era hija del gobernador de Gotlandia oriental. Ingeborg murió hacia 1315 y dejó varios hijos. Brígida, que tenía entonces doce años aproximadamente, fue educada por una tía suya en Aspenas. A los tres años, hablaba con perfecta claridad, como si fuese una persona mayor, y su bondad y devoción fueron tan precoces como su lenguaje. Sin embargo, la santa confesaba que de joven había sido inclinada al Orgullo y la presunción.
La Pasión: centro de su vidaA los siete años tuvo una visión de la Reina de los cielos. A los diez, a raíz de un sermón sobre la Pasión de Cristo que la impresionó mucho, soñó que veía al Señor clavado en la cruz y oyó estas palabras: "Mira en qué estado estoy, hija mía." "¿Quién os ha hecho eso, Señor?", preguntó la niña. Y Cristo respondió: "Los que me desprecian y se burlan de mi amor." Esa visión dejó una huella imborrable en Brígida y, desde entonces, la Pasión del Señor se convirtió en el centro de su vida espiritual.

MatrimonioAntes de cumplir catorce años, la joven contrajo matrimonio con Ulf Gudmarsson, quien era cuatro años mayor que ella. Dios les concedió veintiocho años de felicidad matrimonial. Tuvieron cuatro hijos y cuatro hijas, una de las cuales es venerada con el nombre de Santa Catalina de Suecia. Durante algunos años, Brígida llevó la vida de la época, como una señora feudal, en las posesiones de su esposo en Ulfassa, con la diferencia de que cultivaba la amistad de los hombres sabios y virtuosos.

En la CorteHacia el año 1335, la santa fue llamada a la corte del joven rey Magno II para ser la principal dama de honor de la reina Blanca de Namur. Pronto comprendió Brígida que sus responsabilidades en la corte no se limitaban al estricto cumplimiento de su oficio. Magno era un hombre débil que se dejaba fácilmente arrastrar al vicio; Blanca tenía buena voluntad, pero era irreflexiva y amante del lujo. La santa hizo cuanto pudo por cultivar las cualidades de la reina y por rodear a ambos soberanos de buenas influencias. Pero, aunque Santa Brígida se ganó el cariño de los reyes, no consiguió mejorar su conducta, pues no la tomaban en serio.
Santa Brígida

Las VisionesLa santa empezó tener por entonces las visiones que habían de hacerla famosa. Estas versaban sobre las más diversas materias, desde la necesidad de lavarse, hasta los términos del tratado de paz entre Francia e Inglaterra. "Si el rey de Inglaterra no firma la paz -decía-- no tendrá éxito en ninguna de sus empresas y acabará por salir del reino y dejar a sus hijos en la tribulación y la angustia." Pero tales visiones no impresionaban a los cortesanos suecos, quienes solían preguntar con ironía: "¿Qué soñó Doña Brígida anoche?"
Problemas familiares y peregrinacionesPor otra parte, la santa tenía dificultades con su propia familia. Su hija mayor se había casado con un noble muy revoltoso, a quien Brígida llamaba "el Bandolero" y, hacia 1340, murió Gudmaro, su hijo menor. Por esa pérdida la santa hizo una peregrinación al santuario de San Olaf de Noruega, en Trondhjem. A su regreso, fortalecida por las oraciones, intentó con más ahinco que nunca volver al buen camino a sus soberanos. Como no lo lograse, les pidió permiso de ausentarse de la corte e hizo una peregrinación a Compostela con su esposo. A la vuelta del viaje, Ulf cayó gravemente enfermo en Arras y recibió los últimos sacramentos ya que la muerte parecía inminente. Pero Santa Brígida, que oraba fervorosamente por el restablecimiento de su esposo, tuvo un sueño en el que San Dionisio le reveló que no moriría. A raíz de la curación de Ulf, ambos esposos prometieron consagrarse a Dios en la vida religiosa.

Viuda, vida religiosa, aumentan las visionesSegún parece, Ulf murió en 1344 en el monasterio cisterciense de Alvastra, antes de poner por obra su propósito. Santa Brígida se quedó en Alvastra cuatro años apartada del mundo y dedicada a la penitencia. Desde entonces, abandonó los vestidos lujosos, solo usaba lino para el velo y vestía una burda túnica ceñida con una cuerda anudada. Las visiones y revelaciones se hicieron tan insistentes, que la santa se alarmó, temiendo ser víctima de ilusiones del demonio o de su propia imaginación. Pero en una visión que se repitió tres veces, se le ordenó que se pusiese bajo la dirección del maestre Matías, un canónigo muy sabio y experimentado de Linkoping, quien le declaró que sus visiones procedían de Dios. Desde entonces hasta su muerte, Santa Brígida comunicó todas sus visiones al prior de Alvastra, llamado Pedro, quien las consignó por escrito en latín. Ese período culminó con una visión en la que el Señor ordenó a la santa que fuese a la corte para amenazar al rey Magno con el juicio divino; así lo hizo Brígida, sin excluir de las amenazas a la reina y a los nobles. Magno se enmendó algún tiempo y dotó liberalmente el monasterio que la santa había fundado en Vadstena, impulsada por otra visión.

En Vadstena había sesenta religiosas. En un edificio contiguo habitaban trece sacerdotes (en honor de los doce apóstoles y de San Pablo), cuatro diáconos (que representaban a los doctores de la Iglesia) y ocho hermanos legos. En conjunto había ochenta y cinco personas. Santa Brígida redactó las constituciones; según se dice, se las dictó el Salvador en una visión. Pero ni Bonifacio IX con la bula de canonización, ni Martín V, que ratificó los privilegios de la abadía de Sión y confirmó la canonización, mencionan ese hecho y sólo hablan de la aprobación de la regla por la Santa Sede, sin hacer referencia a ninguna revelación privada.

En la fundación de Santa Brígida, lo mismo que en la orden de Fontevrault, los hombres estaban sujetos a la abadesa en lo temporal, pero en lo espiritual, las mujeres estaban sujetas al superior de los monjes. La razón de ello es que la orden había sido fundada principalmente para las mujeres y los hombres sólo eran admitidos en ella para asegurar los ministerios espirituales. Los conventos de hombres y mujeres estaban separados por una clausura inviolable; tanto unos como las otras, asistían a los oficios en la misma iglesia, pero las religiosas se hallaban en una galería superior, de suerte que ni siquiera podían verse unos a otros.

El monasterio de Vadstena fue el principal centro literario de Suecia en el siglo XV. A raíz de una visión; Santa Brígida escribió una carta muy enérgica a Clemente VI, urgiéndole a partir de Aviñón a Roma y establecer la paz entre Eduardo III de Inglaterra y Felipe IV de Francia. El Papa se negó a partir de Aviñón pero, en cambio envió a Hemming, obispo de Abo, a la corte del rey Felipe, aunque la misión no tuvo éxito. Entre tanto, el rey Magno, que apreciaba más las oraciones que los consejos de Santa Brígida, trató de hacerla intervenir en una cruzada contra los paganos letones y estonios. Pero en realidad se trataba de una expedición de pillaje. La santa no se dejó engañar y trató de disuadir al monarca. Con ello perdió el favor de la corte, pero no le faltó el amor del pueblo, por cuyo bienestar se preocupaba sinceramente durante sus múltiples viajes por Suecia.

En Roma e ItaliaHabía todavía en el país muchos paganos, y Sarta Brígida ilustraba con milagros la predicación de sus capellanes. En 1349, a pesar de que la "muerte negra" hacía estragos en toda Europa, Brígida decidió ir a Roma con motivo del jubileo de 1350. Acompañada de su confesor, Pedro de Skeninge y otros, se embarcó en Stralsund, en medio de las lágrimas del pueblo, que no había de volver a verla. En efecto, la santa se estableció en Roma, donde se ocupó de los pobres de la ciudad, en la espera de la vuelta del Pontífice a la Ciudad Eterna. Asistía diariamente a misa a las cinco de la mañana, se confesaba todos los días y comulgaba varias veces por semana (según era permitido en aquella época). El brillo de su virtud contrastaba con la corrupción de costumbres que reinaba entonces en Roma: el robo y la violencia hacían estragos, el vicio era cosa normal, las iglesias estaban en ruinas y lo único que interesaba al pueblo era escapar de sus opresores. La austeridad de la santa, su devoción a los santuarios, su severidad consigo misma, su bondad con el prójimo, su entrega total al cuidado de los pobres y los enfermos, le ganaron el cariño de muchos. Santa Brígida atendía con particular esmero a sus compatriotas y cada día daba de comer a los peregrinos suecos en su casa que estaba situada en las cercanías de San Lorenzo in Damaso.

Pero su ministerio apostólico no se reducía a la práctica de las buenas obras ni a exhortar a los pobres y a los humildes. En cierta ocasión, fue al gran monasterio de Farfa para reprender al abad, "un hombre mundano que no se preocupaba absolutamente por las almas". Hay que decir que, probablemente, la reprensión de la santa no produjo efecto. Más éxito tuvo su celo por la reforma de otro convento de Bolonia. Allí se hallaba Brígida cuando fue a reunirse con ella su hija, Santa Catalina, quien se quedó a su lado y, fue su fiel colaboradora hasta el fin de su vida. Dos de las iglesias romanas más relacionadas con nuestra santa son la de San Pablo extramuros y la de San Francisco de Ripa. En la primera se conserva todavía el bellísimo crucifijo, obra de Cavallini, ante el que Brígida acostumbraba orar y que le respondió más de una vez; en la segunda iglesia se le apareció San Francisco y le dijo: "Ven a beber conmigo en mi celda". La santa interpretó aquellas palabras como una invitación para ir a Asís. Visitó la ciudad y de allí partió en peregrinación por los principales santuarios de Italia, durante dos años.

Profecías y revelacionesLas profecías y revelaciones Santa Brígida se referían a las cuestiones mas candentes de su época. Predijo, por ejemplo, que el Papa y el emperador se reunirían amistosamente en Roma. Al poco tiempo así lo hicieron (El Papa Beato Urbano V y Carlos IV, en 1368). La profecía de que los partidos en que estaba dividida la Ciudad Eterna recibirían el castigo que merecían por sus crímenes, disminuyeron un tanto la popularidad de la santa y aun le atrajeron persecuciones. Brígida fue arrojada de su casa y tuvo que ir con su hija a pedir limosna al convento de las Clarisas.Por otra parte, ni siquiera el Papa escapaba a sus severas admoniciones proféticas.

El gozo que experimentó la santa con la llegada de Urbano a Roma fue de corta duración, pues el Pontífice se retiró poco después a Viterbo, luego a Montesfiascone y aun se rumoró que se disponía a volver a Aviñón.

Al regresar de una peregrinación, a Amalfi, Brígida tuvo una visión en la que Nuestro Señor la envió a avisar al Papa que se acercaba la hora de su muerte, a fin de que diese su aprobación a la regla del convento de Vadstena. Brígida había ya sometido la regla a la aprobación de Urbano V, en Roma, pero el Pontífice no había dado respuesta alguna. Así pues, se dirigió a Montefiascone montada en su mula blanca. Urbano aprobó, en general, la fundación y la regla de Santa Brígida, que completó con la regla de San Agustín. Cuatro meses más tarde, murió el Pontífice. Santa Brígida escribió tres veces a su sucesor, Gregorio XI, que estaba en Aviñón, conminándole a trasladase a Roma. Así lo hizo el Pontífice cuatro años después de la muerte de la santa.
En 1371, a raíz de otra visión, Santa Brígida emprendió una peregrinación a los Santos Lugares, acompañada de su hija Catalina, de sus hijos Carlos y Bingerio, de Alfonso de Vadaterra y otros personajes. Ese fue el último de sus viajes. La expedición comenzó mal, ya que en Nápoles, Carlos se enamoró de la reina Juana I, cuya reputación era muy dudosa. Aunque la esposa de Carlos vivía aún en Suecia y el marido de Juana estaba en España; ésta quería contraer matrimonio con él y la perspectiva no desagradaba a Carlos. Su madre, horrorizada ante tal posibilidad, intensificó sus oraciones. Dios resolvió la dificultad del modo más inesperado y trágico, pues Carlos enfermó de una fiebre maligna y murió dos semanas después en brazos de su madre. Santa Brígida prosiguió su viaje a Palestina embargada por la más profunda pena. En Jaffa estuvo a punto de perecer ahogada durante un naufragio Sin embargo durante, la accidentada peregrinación la santa disfrutó de grandes consolaciones espirituales y de visiones sobre la vida del Señor.

A su vuelta de Tierra Santa, en el otoño de 1372, se detuvo en Chipre, donde clamó contra la corrupción de la familia real y de los habitantes de Famagusta quienes se habían burlado de ella cuando se dirigía a Palestina. Después pasó a Nápoles, donde el clero de la ciudad leyó desde el púlpito las profecías de Santa Brígida, aunque no produjeron mayor efecto entre el pueblo.
La comitiva llegó a Roma en marzo de 1373. Brígida, que estaba enferma desde hacía algún tiempo, empezó a debilitarse rápidamente, y falleció el 23 de julio de ese año, después de recibir los últimos sacramentos de manos de su fiel amigo, el Padre Pedro de Alvastra. Tenía entonces setenta y un años. Su cuerpo fue sepultado provisionalmente en la iglesia de San Lorenzo in Panisperna. Cuatro meses después, Santa Catalina y Pedro de Alvastra condujeron triunfalmente las reliquias a Vadstena, pasando por Dalmacia, Austria, Polonia y el puerto de Danzig.

Santa Brígida, cuyas reliquias reposan todavía en la abadía por ella fundada, fue canonizada en 1391 y es la patrona de Suecia.

Visiones y escritos

Uno de los aspectos más conocidos en la vida de Santa Brígida, es el de las múltiples visiones con que la favoreció el Señor, especialmente las que se refieren a los sufrimientos de la Pasión y a ciertos acontecimientos de su época. Por orden del Concilio de Basilea, el Juan de Torquemada, quien fue más tarde cardenal, examinó el libro de las revelaciones de la santa y declaró que podía ser muy útil para la instrucción de los fieles; pero tal aprobación encontró muchos opositores. Por lo demás; la declaración de Torquemada significa únicamente que la doctrina del libro es ortodoxa y que las revelaciones no carecen de probabilidad histórica. El Papa Benedicto XIV, entre otros, se refirió a las revelaciones de Santa Brígida en los siguientes términos: "Aunque muchas de esas revelaciones han sido aprobadas, no se les debe el asentimiento de fe divina; el crédito que merecen es puramente humano, sujeto al juicio de la prudencia, que es la que debe dictarnos el grado de probabilidad de que gozan para que crearnos píamente en ellas."
Santa Brígida, con gran sencillez de corazón, sometió siempre sus revelaciones a las autoridades eclesiásticas y, lejos de gloriarse por gozar de gracias tan extraordinarias, las aprovechó como una ocasión para manifestar su obediencia y crecer en amor y humildad. Si sus revelaciones la han hecho famosa, ello se debe en gran parte a su virtud heroica, consagrada por el juicio de la Iglesia.

El libro de sus revelaciones fue publicado por primera vez en 1492.

Las brigidinas tienen unas lecciones de maitines tomadas de sus revelaciones sobre las glorias de María, conocidas con el nombre de "Sermo Angelicus", en recuerdo de las palabras del Señor a la santa: "Mi ángel te comunicará las lecciones que las religiosas de tus monasterios deben leer en maitines, y tú las escribirás tal como él te las dicte".

LUISA DE MARILLAC

Nació en París en 1591, Hija de Louis de Marillac, señor de Ferrieres. Perdió a su madre desde temprana edad, pero tuvo una buena educación, gracias, en parte, a los monjes de Poissy, a cuyos cuidados fue confiada por un tiempo, y en parte, a la instrucción personal de su propio padre, que murió cuando ella tenía poco más de quince años. Luisa había deseado hacerse hermana capuchina, pero el que entonces era su confesor, capuchino él mismo, la disuadió de ello a causa de su endeble salud. Finalmente se le encontró un esposo digno: Antonio Le Gras, hombre que parecía destinado a una distinguida carrera y que ella aceptó. Tuvieron un hijo. En el período en que Antonio estuvo gravemente enfermo, ella lo cuidó con esmero y completa dedicación.. Desgraciadamente, Luisa sucumbió a la tentación de considerar esta enfermedad como un castigo por no haber mostrado su agradecimiento a Dios, que la colmaba de bendiciones, y estas angustias de conciencia fueron motivos de largos períodos de dudas y aridez espiritual. Tuvo, sin embargo, la buena fortuna de conocer a San Francisco de Sales, quien pasó algunos meses en París, durante el año 1619. De él recibió la dirección más sabia y comprensiva. Pero París no era el lugar del santo.

Un poco antes de la muerte de su esposo, Luisa hizo voto de no contraer matrimonio de nuevo y dedicarse totalmente al servicio de Dios. Después, tuvo una extraña visión espiritual en la que sintió disipadas sus dudas y comprendió que había sido escogida para llevar a cabo una gran obra en el futuro, bajo la guía de un director a quien ella no conocía aun. Antonio Le Gras murió en 1625. Pero ya para entonces Luisa había conocido a "Monsieur Vicente", quien mostró al principio cierta renuncia en ser su confesor, pero al fin consintió. San Vicente en aquel tiempo estaba organizando sus "Conferencias de Caridad", con el objeto de remediar la espantosa miseria que existía entre la gente del campo, para ello necesitaba una buena organización y un gran numero de cooperadores. La supervisión y la dirección de alguien que infundiera absoluto respeto y que tuviera, a la vez, el tacto suficiente para ganarse los corazones y mostrarles el buen camino con su ejemplo.

A medida que fue conociendo más profundamente a "Mademoiselle Le Gras", San Vicente descubrió que tenía a la mano el preciso instrumento que necesitaba. Era una mujer decidida y valiente, dotada de clara inteligencia y una maravillosa constancia, a pesar de la debilidad de salud y, quizás lo más importante de todo, tenía la virtud de olvidarse completamente de si misma por el bien de los demás. Tan pronto como San Vicente le habló de sus propósitos, Luisa comprendió que se trataba de una obra para la gloria de Dios. Quizás nunca existió una obra religiosa tan grande o tan firme, llevada a cabo con menos sensacionalismo, que la fundación de la sociedad, que fue conocida como "Hijas de la Caridad" y que se ha ganado el respeto de los hombres de la más diversas creencias en todas partes del mundo. Solamente después de cinco años de trato personal con Mlle. Le Gras, Monsieur Vicente, que siempre tenía paciencia para esperar la oportunidad enviada por Dios, mandó a esta dama devota, en mayo de 1629, a hacer lo que podríamos llamar una visita a "La Caridad" de Montmirail. Esta fue la precursora de muchas misiones similares y, a pesar de la mala salud de la señorita, tomada muy en cuenta por San Vicente, ella no retrocedió ante las molestias y sacrificios.

En 1633, fue necesario establecer una especie de centro de entrenamiento o noviciado, en la calle que entonces se conocía como Fosses-Saint-Víctor. Ahí estaba la vieja casona que Le Gras había alquilado para sí misma después de la muerte de su esposo, donde dio hospitalidad a las primeras candidatas que fueron aceptadas para el servicio de los pobres y enfermos; cuatro sencillas personas cuyos verdaderos nombres quedaron en el anonimato. Estas, con Luisa como directora, formaron el grano de mostaza que ha crecido hasta convertirse en la organización mundialmente conocida como Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl. Su expansión fue rápida. Pronto se hizo evidente que convendría tener alguna regla de vida y alguna garantía de estabilidad. Desde hacía tiempo, Luisa había querido ligarse a este servicio con voto, pero San Vicente, siempre prudente y en espera de una clara manifestación de la voluntad de Dios, había contenido su ardor. Pero en 1634, el deseo de la santa se cumplió. San Vicente tenía completa confianza en su hija espiritual y fue ella misma la que redactó una especie de regla de vida que deberían seguir los miembros de la asociación. La sustancia de este documento forma la médula de la observancia religiosa de las Hermanas de la Caridad Aunque éste fue un gran paso hacia adelante, el reconocimiento de las Hermanas de la Caridad como un instituto de monjas, estaba todavía lejos.
En la actualidad, la blanca cofia y el hábito azul al que sus hijas han permanecidos fieles durante cerca de 300 años, llaman inmediatamente la atención en cualquier muchedumbre. Este hábito es tan sólo la copia de los trajes que antaño usaban las campesinas. San Vicente, enemigo de toda pretensión, se opuso a que sus hijas reclamaran siquiera una distinción en sus vestidos para imponer ese respeto que provoca el hábito religioso. No fue sino hasta 1642, cuando permitió a cuatro miembros de su institución hacer votos anuales de pobreza, castidad y obediencia y, solamente 13 años después, obtuvo en Roma la formal aprobación del instituto y colocó a las hermanas definitivamente bajo la dirección de la propia congregación de San Vicente. Mientras tanto, las buenas obras de las hijas de la caridad se habían multiplicado aceleradamente. En el desarrollo de todas estas obras, Mlle. Le Gras soportaba la parte más pesada de la carga. Había dado un maravilloso ejemplo en Angers, al hacerse cargo de un hospital terriblemente descuidado. El esfuerzo había sido tan grande, que a pesar de la ayuda enorme que le prestaron sus colaboradores, sufrió una severa postración que fue diagnosticada erróneamente, como un caso de fiebre infecciosa. En París había cuidado con esmero a los afectados durante una epidemia y, a pesar de su delicada constitución, había soportado la prueba. Los frecuentes viajes, impuestos por sus obligaciones, habrían puesto a prueba la resistencia de un ser más robusto; pero ella estaba siempre a la mano cuando se la requería, llena de entusiasmo y creando a su alrededor una atmósfera de gozo y de paz. Como sabemos por sus cartas a San Vicente y a otros, solamente dos cosas le preocupaban: una era el respeto y veneración con que se le acogía en sus visitas; la otra era la ansiedad por el bienestar espiritual de su hijo Miguel.

En el año de 1660, San Vicente contaba ochenta años y estaba ya muy débil. La santa habría dado cualquier cosa por ver una vez más a su amado padre, pero este consuelo le fue negado. Sin embargo, su alma estaba en paz; el trabajo de su vida había sido maravillosamente bendecido y ella se sacrificó sin queja alguna, diciendo a las que la rodeaban que era feliz de poder ofrecer a Dios esta última privación. La preocupación de sus últimos días fue la de siempre, como lo dijo a sus abatidas hermanas: "Sed empeñosas en el servicio de los pobres... amad a los pobres, honradlos, hijas mías, y honraréis al mismo Cristo". Santa Luisa de Marillac murió el 15 de marzo de 1660; y San Vicente la siguió al cielo tan sólo seis meses después. Fue canonizada en 1934.

Juramento de Florence Nigtingale:

Solemnemente ante Dios y en presencia de esta asamblea:
Llevar una vida digna y ejercer mi profesión con fidelidad a la misma.
Me abstendré de todo cuanto sea nocivo o dañino, y no tomaré ni suministraré sustancia alguna que sea perjudicial.

Haré cuanto esté a mi alcance para mantener y elevar el nivel de mi profesión y consideraré confidencial toda información personal que me sea revelada y todos los asuntos familiares de los que tenga conocimiento en el ejercicio de mi profesión.
Con lealtad me esforzaré para ayudar al médico en su trabajo y consagraré mi vida al bienestar de quienes están confiados a mi cuidado

IMPÒRTANCIA DE LA LAMPARA

La enfermería desde sus inicios ha sido acompañada por una simbología que la caracteriza y que encierra un significado relevante en su desarrollo como profesión.

En la actualidad a pesar de la existencia de norma y el esfuerzo que se viene realizando se observa con frecuencia modidificaciones.

La enfermería, desde sus inicios ha sido acompañado por una simbología que la caracteriza y encierra un significado relevante en su desarrollo como profesion.Revelante en su desarrollo como profesión la actualidad a pesar de la existencia de normas y de esfuerzo que se viene realizando,se observa con frecuencia modificaciones y uso incorrecto del uniforme.Para argumentar la importancia del uso adecuado de uniforme y sus atributos y su efecto social, sé efectuó una revisión bibliografica y consultas o expertos de la asistencia y la docencia en esta temática, en el primer trimestre del año 2005. se expone los elementos esenciales para el uso correcto de esta vestimenta y pata la buena apariencia del personal de enfermería en los servicios asistenciales.Los profesionales de enfermería tiene la responsabilidad como agentes de cambio.Una enfermera(o) vestido correctamente inspira confianza y es socialmente respetado.Los aspectos planteados permitirán revalorar la importancia del uso correcto del uniforme, elemento esencial para una buena imagen social de los enfermos (a).

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